La búsqueda global no está activada.
Salta al contenido principal

"La naturaleza nunca traza una línea sin mancharla"

Ala Lorna


Con la introducción de los sistemas de clasificación DSM-5 (APA, 2013) y CIE-11 (OMS, 2018), la división de la antigua categoría de trastornos generalizados del desarrollo en entidades clínicas especiales como el autismo, el síndrome de Asperger, el trastorno generalizado del desarrollo no especificado, etc. dejó de aplicarse. Existe una categoría única de trastornos del espectro autista en estos sistemas de clasificación. La idea del espectro autista se originó con Lorne Wing en la década de 1980. Incluso entonces, se dio cuenta de que las numerosas diferencias individuales que existen dentro del espectro autista no pueden entenderse adecuadamente si tratamos de clasificar a las personas con autismo en subcategorías clínicas limitadas y distintivas.

Los investigadores contemporáneos del autismo prefieren hablar sobre los perfiles funcionales de las personas con autismo, en lugar de entidades clínicas separadas. Se sabe, por ejemplo, que el autismo puede ir acompañado de cualquier combinación de funcionamiento intelectual y habla-lenguaje. Según la CIE-11 (OMS, 2018) hay cuatro perfiles de individuos verbales en el espectro:


  1. sin trastorno del funcionamiento intelectual y con deterioro leve o nulo del lenguaje funcional

  2. con trastorno en el desarrollo intelectual y con deterioro leve o nulo en el lenguaje funcional

  3. sin trastorno del funcionamiento intelectual y con deterioro del lenguaje funcional

  4. con trastorno en el desarrollo intelectual y con deterioro del lenguaje funcional.


El lenguaje funcional deteriorado significa que una persona con autismo solo puede usar palabras sueltas y frases simples con fines instrumentales. Algunas personas en el espectro, especialmente aquellas con formas más graves de discapacidad intelectual, nunca desarrollan el habla. Si tenemos en cuenta las grandes variaciones individuales en la salud física y mental, los perfiles sensoriales, el entorno familiar y la historia de vida, está claro que no podemos esperar que todos los empleados potenciales diagnosticados con TEA tengan las mismas o similares necesidades de apoyo.


Autism spectrum disorder

Figura 2

Trastorno del espectro autista – Niveles de apoyo


El nivel de apoyo que necesita una persona con autismo depende del contexto y puede cambiar con el tiempo. Con base en ciertos parámetros, es posible determinar si una persona con autismo requiere un apoyo mínimo (Nivel 1), un apoyo sustancial (Nivel 2) o un apoyo muy sustancial (Nivel 3). El nivel de las necesidades de apoyo se determina especialmente para el ámbito de la comunicación social y para el ámbito de las actividades e intereses limitados, estereotipados y repetitivos.


Descargar

Próximo >


< Regresar al Módulo 1